April 14, 2006
BN 1172 DF/MM/MC ABR. 2006
Lo que opina Dios sobre cuestiones y actitudes actuales de la Familia
Carta de MaríaDF/MM/MC 3591 II-2006
Los pensamientos motivadores esparcidos por la Carta suelen referirse en general a los temas de entrega y discipulado, no siempre a la cuestión que se haya tratado en los párrafos precedentes.
La cuestión:
1. Algunos piensan que si tienen una actitud de apremio e invocan las llaves cuando reciben una profecía, esta no resultará afectada por sus desobediencias o pecados, o por aspectos en los que estén insumisos o descarriados. Es pensar: «Sé que en realidad no estoy obedeciendo mucho al Señor y que albergo tal o cual pecado en mi vida, pero he invocado las llaves, y como son poderosas, podré recibir un mensaje claro en profecía.»
Lo que piensa Dios:
2. (Jesús:) Todas Mis esposas quieren ser conductos despejados y confiables. Ninguna quiere recibir una profecía contaminada que pudiera causar algún daño. La sola idea de ser responsable de una profecía que perjudique a alguien en algún sentido es terrible. Nadie lo desea. Todo el mundo quiere estar en sintonía conmigo, en el espíritu y en guardia y ser el mejor conducto posible.
3. En general, escucharme en profecía infunde mucho apremio. Aunque se tengan debilidades, a la hora de recibir profecías la mayoría tiene mucho apremio por captar el mensaje bien y conocer Mi voluntad mediante Mis palabras a pesar de sus debilidades. Es cierto que tienen que acudir a Mí con apremio, pues ello ciertamente ayuda a limpiar y despejar su conducto. El apremio es un espíritu de humildad y reverencia a Mí que ayuda a recibir Mis palabras más claro y más fácil.
4. He hablado mucho del espíritu de apremio, que exige, naturalmente, sumisión y humildad de parte de ustedes. No pueden tener verdadero apremio a menos que también deseen estar sumisos a Mí y tener humildad ante Mí. Por eso, tener una actitud de apremio a la hora de recibir profecías es muy bueno y necesario‚ pero para ser un conducto despejado y confiable hace falta algo más.
5. Tengan en cuenta este caso hipotético: hay un hermano que por lo general anda fuera de onda. Todo el Hogar sabe que lo aqueja el orgullo. Se la pasa dando órdenes. Siempre anda apresurado y casi nunca se toma tiempo para hablar con los demás. No se lo conoce por su actitud de oración ni por consultármelo todo. Se ve que toma las decisiones a las carreras. Ni siquiera se lo ve feliz. Critica a los demás, los rebaja y luego se pregunta por qué no tendrá amigos. Y hace poco se descubrió que, por alguna razón desconocida, sabiendo que contraviene por completo los Estatutos, probó drogas.
6. «¿Qué pasa? ¿Por qué consumiste drogas?» «Bueno, a lo mejor te lo digo en algún momento. Pero ahora mismo no puedo pensar en ello porque tengo que recibir una profecía importante. Estoy hecho un lío, pero seguro que si invoco las llaves, no importará y recibiré un mensaje claro del Señor.»
7. No necesariamente, amigo Mío. Las llaves son poderosas e importantes, pero si tu vida es una rutina de insumisión, desobediencia a la Palabra y una sucesión de actos motivados por el orgullo, no puedes esperar que con chasquear los dedos, invocar las llaves y hacer una oración con apremio‚ recibirás como por arte de magia instrucción perfectamente confiable del Cielo.
8. Ahora bien, con el ejemplo anterior exageré un poco para transmitir una idea. Está claro que no tolerarían en su Hogar a alguien que actuara así y fuera un oprobio tan grande para su obra. Y en el caso de una infracción tan grave a los Estatutos, seguramente se sancionaría a la persona con un período de prueba o incluso se la excomulgaría. Lo que trato de dejar claro con este ejemplo un tanto descabellado es que sus malas decisiones, sus desobediencias y el pecado que alberguen afectarán su conducto y no podrán invocar las mismas promesas que quienes deciden con acierto, son obedientes y se mantienen alerta contra el pecado.
9. Su conducto es terrenal y, por consiguiente, tienen que velar por él. Claro que puedo obrar milagros e incluso hacer que un asno tonto vea el plano espiritual y transmita Mis mensajes. Claro que puedo detener el sol. Claro que puedo hablar a través de cualquier conducto en cualquier momento y‚ milagrosamente, transmitir revelaciones, consejos claros y todo lo que haga falta.
10. ¿Pero saben cuáles son los conductos a los que elijo para transmitir esas revelaciones claras y proféticas? No a los que están llenos de insumisión, orgullo‚ desobediencia, falta de amor al prójimo y de oración que ni se esfuerzan por obedecer el Vino Nuevo. No hace falta que tengan Mi supercerebro para saber que quien no sea fiel en mantener su vida a Mi servicio en el buen camino tampoco será un conducto de fiar.
11. Medítenlo. ¿Les gustaría que alguien que saben que no tiene el corazón recto ante Mí me escuchara con relación a un asunto muy importante para ustedes, como trasladarse a otro país, asumir tareas de más peso, casarse, decidir si deben someterse a una operación, o algo por el estilo? ¿No preferirían que el conducto fuera alguien que procurara con apremio cada día tener la actitud debida ante Mí? La respuesta es obvia.
12. No pueden vivir al borde del pecado y la desobediencia y luego esperar que Yo limpie toda la mugre de su orgullo y desobediencia con que solo hagan una oración e invoquen unas pocas llaves a fin de escucharme con claridad en profecía. No funciona así. Necesito conductos que se esfuercen al máximo cada día de su vida por tener el corazón lo más recto posible ante Mí.
13. Recibir profecías conlleva una gran responsabilidad, y los que se lo toman en serio saben que también tienen que tomarse en serio todos los demás aspectos de su vida a Mi servicio. No pueden convertirse en conductos cuando se les antoje con solo accionar un interruptor, mientras el resto de su vida son desobedientes, insumisos, orgullosos, desamorados o cualquier otra cosa. ¿Qué clase de conducto serían? Su conducto solo será tan bueno y confiable como su vida diaria.
14. Si se esfuerzan al máximo por mejorar en sus puntos flacos, cuando llegue el momento de escucharme en profecía, su conducto será sumiso. Si hacen todo lo que pueden por mantener su vida limpia de la contaminación del Sistema, su conducto no estará obstruido por influencias del Sistema. Si realmente tratan de tener el corazón recto ante Mí confesándome sus pecados y pidiéndome que los limpie, cuando acudan a Mí para recibir una profecía, tendrán el conducto despejado.
15. La meta no es alcanzar la perfección. Ningún conducto es perfecto. «Todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios» (Rom.3:23). Siempre habrá pecado en su vida, pero no deben elegir la desobediencia y el pecado. A veces, optar por el pecado puede significar sencillamente decidir no tomar medidas para superar una debilidad, o adicción que tienen.
16. Las debilidades de algunos son más evidentes tanto para ellos mismos como para los demás. En ciertos sentidos‚ esos la tienen más fácil. Saben en qué aspectos necesitan esforzarse por mejorar y contra qué luchar. Puede que en el caso de otros sus debilidades no sean tan obvias ni para ellos ni para los demás y necesiten más la ayuda de sus pastores. Sea como sea, todos deben buscar ayuda y tomar medidas para efectuar los cambios que les indique que hacen falta.
17. Si se limitan a dejarse llevar por la corriente y a tolerar sus debilidades, pensando que nunca cambiarán por lo que no ganan nada con tomarse la molestia‚ eso es pura desobediencia e insumisión. Gran parte del acto de profetizar empieza antes de que entren siquiera a solas al aposento. Comienza en cuanto se despiertan por la mañana, con sus pensamientos y lo activamente que empleen las armas del espíritu, invoquen a sus ayudantes espirituales y se esfuercen por progresar en sus puntos flacos. Tienen que conducirse como discípulos de la Familia. Tienen que demostrar con sus actos que creen lo que dicen las BN y esforzarse al máximo por obedecer Mi Palabra y ponerla en práctica en su vida diaria, no solo a la hora de recibir profecías.
18. Los he elegido a ustedes, vasijas débiles, terrenales, imperfectas y pecadoras, para recibir Mis palabras puras. Pero también espero que hagan lo humanamente posible por ser vasijas limpias, no contaminadas‚ vasijas obedientes y sumisas. Esto lo logran con su forma de vivir cada día. Luego‚ cuando llegue el momento de recibir Mis palabras puras, ya tendrán espíritu de sumisión, obediencia, apremio y fe, y será mucho menos probable que reciban una profecía contaminada o influenciada que pudiera causar daños.
19. Por eso, sean sumisos y obedientes y tengan actitud de apremio ante Mí cada día. Estén dispuestos a aceptar el pastoreo que necesiten y mantengan su corazón limpio de la polución del mundo.
20. Pregúntenme cómo pueden hacer para ser sin falta los mejores conductos posibles. Estén dispuestos a obedecer y a hacer lo que sea que les diga. Si no están dispuestos a renunciar a su orgullo en algún aspecto, o lo que sea que les indique que deban hacer, ¿cómo pueden esperar tener la humildad necesaria para recibir profecías? Los pecados del orgullo y la desobediencia tienen un efecto en su vida, y con el tiempo tendrán un efecto nocivo en su capacidad de recibir profecías confiables.
21. Les conviene ocuparse en mejorar su conexión conmigo, su obediencia, el ejemplo que dan y su sumisión como discípulos, y seguir empeñados sin cesar en ello. Su forma de vivir, sus pensamientos y lo que creen afecta todo, incluido su conducto.
En resumen:
22. (Mamá:) Ser un conducto despejado es una forma de vida. No está garantizado que lo sean si lo único que hacen es orar e invocar las llaves justo antes de escuchar al Señor‚ independientemente del estado del resto de su vida espiritual. El don de poder recibir profecías claras, completas y sin influencias externas lo reciben los que viven como discípulos; las personas obedientes y sumisas que se empapan del Vino Nuevo, lo creen, se esfuerzan por cumplirlo y mantienen su vida limpia de pecados no confesados.
23. Les paso brevemente, a modo de repaso, una lista de los requisitos más importantes para ser un conducto despejado. Están sacados de las CM 3275 y 3243. Si desean una explicación más detallada de por qué son tan importantes todas estas cualidades, les recomiendo que relean y estudien la serie Aclaraciones sobre el don de profecía, que contiene respuestas a las preguntas más frecuentes y explica en detalle por qué es esencial cumplir cada uno de los requisitos para ser un buen conducto.
Promesa de las llaves:
24. Las llaves del discipulado te ayudarán a vivir como discípulo cada día. De ese modo, cuando llegue el momento de escucharme, podrás pedir con plena fe lo que necesites y lo recibirás.
Pensamiento motivador:
25. (Jesús:) Los dones del espíritu se otorgan en abundancia a los que demuestran que los aprecian, los que son dignos de ellos; no porque sean perfectos, ya que nadie es justo, sino porque se muestran dignos con su fidelidad y obediencia y siguiendo de cerca.
26. Los dones del espíritu se manifiestan con fuerza en quienes son fuertes espiritualmente, y se debilitan en los que siguen de lejos. Por eso‚ si valoras los dones espirituales, quédate cerca de Mí y sé digno de ellos. Si haces todo lo que te pida, me place darte Mis dones en abundancia.
Ahonda más:
qPreguntas que quizá te has planteado acerca de las profecías, 3ª parte, CM 3036:2-13‚ BN 668
qLa sorpresa de Mamá, 2ª parte, CM 3134:137–138‚ BN 743
qConsultar al Señor a cada paso, CM 3149:117-123, BN 754
qCircular de Mamá, nº9, CM 3243:129,131-133,135,140-144,149-153‚ BN 845
qAclaraciones sobre el don de profecía, 1ª parte, CM 3275:76-83, BN 875
qAclaraciones sobre el don de profecía, 2ª parte, CM 3304:100-133, 137–161, BN 905
qComplemento del día de ayuno, CM 3381:32-44, BN en línea nº1
qTemas de interés, 16ª parte, CM 3450:160-171,173, BN 1040
La cuestión:
27. (Mamá:) Con el paso de los años, da la impresión de que se ha debilitado su fe en el principio de Hechos 2:44 y 45, sobre todo en cuanto al fondo común de los Hogares. Este es un aspecto en que, a nivel de Familia, nos hemos permitido transigir. Sin embargo, recientemente hemos destacado la necesidad de que en los Hogares se tenga un fondo común. Es un punto importante de los criterios de la junta de orientación y pastoreo para la evaluación de los Hogares, y se destacó en la enmienda a los Estatutos titulada Fondo común (la cual también se publicó en los mencionados criterios).
28. A pesar de ello, parece que a muchos les hace falta verdadera fe en el plan de aportar todos los ingresos al fondo común, o por lo menos necesitan más motivación para impulsarlo de lleno. Se preguntan cómo pueden hacer para que funcione de manera eficaz, cómo podrán cubrir los gastos médicos y de otra índole de los integrantes de su Hogar, qué hacer para que todos tengan lo suficiente, que nadie tenga de más, que se satisfagan las necesidades de todos, etc.
Lo que piensa Dios:
29. (Jesús:) Gracias, Mis entrañables amores, por tomar su cruz y seguirme, por estar dispuestos a contarse entre Mis seguidores, Mis discípulos, Mis esposas del Tiempo del Fin. Gracias por su fe para poner en práctica Mi Palabra de lleno; no en parte ni con reservas, como muchos cristianos e iglesias, sino en su totalidad, cada día, motivados por el amor a Mí y al prójimo. Su amor y entrega son un gran testimonio para el mundo, y hasta para el mundo espiritual‚ de que es posible vivir tan plenamente para Mí, ¡aun fuera del plano celestial!
30. Sin embargo, tengo algo contra ustedes, Mis esposas, su egoísmo, pues algunas han dejado de lado uno de los principios sobre los cuales se fundó tanto Mi iglesia primitiva como la Familia: Hechos 2:44-45. En vez de tenerlo todo en común, sus posesiones‚ sus bienes y su economía, dando a cada uno según su necesidad a fin de que a nadie le falte nada, han modificado Mi plan.
31. Muchos han decidido tenerlo casi todo en común, y compartir parte de sus bienes, posesiones y economía, siempre y cuando no les falte nada. En vez de tenerlo todo en común, de tener un fondo común en el Hogar, han decidido ceñirse al plan de tener ciertas cosas en común, unas veces más y otras veces menos, repartiéndose ciertos gastos y conservando el resto de sus ingresos para sus necesidades o deseos particulares. No fue ese el plan que establecí para Mi iglesia primitiva, ni el que trazó David para la Familia primitiva, ni el plan que deseo que siga la Familia en la actualidad.
32. Mis amores, ¿cómo pueden decir que viven como Yo y como Mis primeros discípulos si no es así? Si en su Hogar hay egoísmo porque cada integrante solo entrega parte de sus bienes, posesiones y dinero a los demás, por considerar que debe velar primero por sus intereses, sus necesidades y su familia, ¿cumplen con ello Mi plan económico? ¿Demuestra eso fe en que velaré por ustedes y proveeré para sus necesidades? ¿Constituye una muestra de confianza en que nunca pueden dar más que Yo?
33. ¿Es esto una señal de amor auténtico por los demás y de considerarlos superiores a ustedes mismos‚ aun en los asuntos económicos? ¿Es eso una manifestación del amor desinteresado de Dios, de la Ley del Amor, de amar al prójimo como a sí mismos? Aunque tengan ciertas cosas en común y tengan un fondo común con parte del dinero, ¿no es esa a fin de cuentas una actitud de ponerse primero a sí mismos y a los suyos? ¿No es eso lo que hace el mundo?
34. Por ese egoísmo, por retener ese dinero, sus Hogares resultan perjudicados. Algunos integrantes tienen todo lo que necesitan mientras que otros pasan necesidad, y eso mina la unidad y el amor con pequeñas raíces de envidia, resentimiento y egoísmo. Tampoco puedo bendecir de lleno los ingresos del Hogar y proveer para todos como desearía, porque, ¿cómo voy a bendecir un espíritu de egoísmo y de retener, de ponerse primero a uno mismo en vez de primero a los demás y la Familia?
35. Tenerlo todo en común, incluso el dinero, era la piedra angular de Mi iglesia primitiva, y quiero que sea también la de la Familia, tanto ahora como en el futuro. ¡Qué ejemplo y testimonio tan grande dan cuando pueden decir que tienen en común todo el dinero y que lo reparten entre los adultos y niños según lo necesiten!
36. ¡Qué ejemplo tan grande de Mi amor es ese! ¡Resplandece ahora y resplandecerá en el futuro, cuando el corazón de los hombres del mundo se vuelva cada vez más tenebroso y egoísta! ¡Qué manifestación tan grande de amor, obediencia y confianza es que estén dispuestos a poner todos sus ingresos a los pies de los apóstoles, a fin de que se dé a cada uno conforme a su necesidad! Qué hermoso es que entreguen todo lo que tengan -ya sea la blanca de la viuda o el equivalente a la ofrenda de un rico- a las arcas del Hogar.
37. Les ruego, Mis amores, que dejen de lado todo egoísmo‚ división y falta de amor y amen de lleno compartiendo todo el dinero. Entreguen todos sus ingresos‚ así como han entregado todo su corazón, mente, vida y espíritu a Mi causa. Den todo el dinero a sus hermanos‚ a la Familia‚ así como les han entregado la vida.
38. Al darlo todo, lo recibirán todo a cambio. Al compartirlo todo, tendrán parte en todo. Que no haya más en sus Hogares ricos y pobres, unos que tengan mientras otros pasan necesidad. Que reinen el amor y la generosidad y abunden el desinterés, el amor abnegado‚ la preocupación y el desvelo por los demás. Y si algo debe faltar, que sean el egoísmo y el interés personal. Ténganlo todo en común, y lo tendrán todo, de acuerdo con su necesidad.
39. Comprendo que puede parecer difícil, y algunos protestarán diciendo que no funciona, que no es viable, que es anticuado, o pondrán muchos otros peros. Sin embargo, les garantizo que funcionará, que es viable y no es anticuado, porque Mi plan económico para la iglesia ha funcionado durante siglos y seguirá funcionando. Lo que pasa es que‚ al igual que el cristianismo auténtico‚ muy pocos han estado dispuestos a probarlo.
40. No sean de los que dicen: «No funcionará». Sean de los que dicen: «Funcionará; ¡nos encargaremos de que funcione como lo quiso el Señor! Vamos a perseverar, limaremos las asperezas, mantendremos la comunicación y cooperación con amor, y resultará, porque contamos con el Señor, Su amor y el poder de las llaves. ¡Nada es imposible para nosotros, y lo demostraremos y viviremos así porque amamos al Señor y nos amamos los unos a los otros!»
41. ¿Pueden adoptar esa postura de fe? Si ya me han dado tanto, su corazón, su vida y cada día, ¿no pueden confiarme también su dinero, teniendo fe en que lo hago todo bien y no permitiré que les falte nada? Espero que sí‚ Mis amores, pues quiero darles más y proveer más para todos, a fin de que no le falta nada a nadie. Pongan su voluntad de Mi parte para que pueda verter en gran abundancia sobre ustedes como deseo. ¡Los amo y me encanta proveer para ustedes! Pruébenme ahora en esto y verán que lo hago. Si hacen su parte, cumpliré la Mía.
Lectura adicional:
42. (Jesús:) En la Biblia y a lo largo de la historia del cristianismo –partiendo por la iglesia primitiva-, ha estado presente el tema de la generosidad y el compartir. Pero en los últimos tiempos esos dos conceptos fundamentales se han visto enturbiados por el egoísmo en que han caído Mis esposas.
43. Les explicaré el problema más a fondo: en el mundo se ha extendido la actitud de obtener todo lo que se pueda mientras se pueda, aferrarse a tanto como se pueda y no dar ni compartir nada a menos que se gane algo a cambio. Esa actitud tan egoísta de ponerse primero uno mismo la han propagado en el mundo los espíritus de la codicia y la concupiscencia.
44. La Familia se ha visto afectada por esa actitud, que rompe la libertad de espíritu y la unidad que quiero infundir a los Hogares. En el plano espiritual‚ cuando se le da cabida a esa actitud egoísta de ponerse primero a uno mismo, es como si cada persona del Hogar contuviera un poco Mi río de provisión. Al poco tiempo el río corre más lento, se acumula suciedad y cada uno trata de mantener el máximo de agua en su pequeña reserva personal, mientras los demás pasan sed.
45. Cuando se hace eso, se desvía la fortaleza de Mi Espíritu y se separan los unos de los otros con muros. Es como si todos fueran a nadar a un lago y cada uno insistiera en que el agua que lo rodea sea privada, y llevara una caja o recipiente grande en el que nadar solo. La diversión, intimidad y emoción del movimiento libre de Mi Espíritu desaparecen casi por completo, mientras todos se quedan en sus aguas estancadas dentro de Mi Espíritu.
46. Eso tiene su efecto en el Hogar. El acaparamiento de cada uno impide que otros obtengan lo que necesitan y erige muros que los separan unos de otros. Mi Espíritu no puede manifestarse con plena libertad, y el Hogar sufre a consecuencia de ello.
47. Cuando nadie lleva sus divisiones y piscinas personales al encuentro de natación, Mi agua corre sin trabas y todos pueden participar de los sentimientos y corrientes de Mi Espíritu. Nadie frena ni corta a otros el paso de las aguas de Mi Espíritu y Mis bendiciones. Todos tienen lo que necesitan. Están felices. Gozan de intimidad entre ellos. Manifiestan amor y generosidad.
48. Ese es el ambiente que deben fomentar en su Hogar. Tiene que empezar por alguna parte, así que ¿por qué no por ustedes mismos? Pueden dar buen ejemplo de generosidad y no esforzarse por quedarse siempre con la mejor parte del aprovisionamiento, ni tener un fondo privado que hayan recaudado por su cuenta ni velar tan celosamente por sus posesiones que no puedan prestarlas cuando haga falta.
49. Dejen que Mi Espíritu elimine las barreras mientras se abren, comparten y dan. Sacrifiquen el dinero que podrían obtener de la venta de algún artículo‚ y piensen que tal vez Yo pueda desear que lo regalen, que lo entreguen a quien tenga necesidad. Todo eso abrirá las compuertas del Cielo y el caudal de Mi provisión y el Espíritu entrará a raudales llevándose lo viejo, la chatarra y las aguas estancadas que han acaparado. Entrará un espíritu fresco y vivo al Hogar y tendrán satisfechas sus necesidades.
50. La idea es tenerlo todo en común. Cuando en el Hogar reine un espíritu de generosidad‚ verán que sus necesidades estarán satisfechas y que Mi provisión es mayor y más abundante. Y algo más importante: se generará una libertad espiritual que lavará el Hogar, llevándose las aguas viejas y estancadas que se habían acaparado‚ e infundirá fuego y alegría a cada corazón.
51. Dar y compartir sin trabas es una muestra de cómo funciona el Cielo, donde Mi provisión celestial fluye de persona en persona, satisfaciendo cada necesidad. Abre las compuertas para que Yo pueda derramar más sobre ustedes. Es abrirse y confiar en que proveeré lo que necesiten, sabiendo que puedo hacerlo mucho mejor que ustedes. Por eso, al final terminan con una provisión mucho mayor y mejor que si hubieran tratado de aferrarse a todo y proveer para sí mismos.
52. Recuerden que conozco sus necesidades. Sé lo que necesitan antes de que pidan. Puedo ayudarles a tomar las decisiones acertadas de abrirse, dar, entregar y confiar en que proveeré cuando tengan necesidad.
53. El egoísmo y la avaricia tienen en realidad su raíz en la falta de confianza en Mí. Les parece que tienen que echar mano mientras haya ocasión, porque quizá llegue la hora en que lo necesiten y no lo tengan. Motivados por ese razonamiento carnal, se olvidan por completo de tenerme en cuenta en la ecuación. Me sacan por completo del panorama, y por consiguiente, descuidan su mayor fuente de provisión.
54. Tienen que orar por una actitud de confianza y fe en Mí en su Hogar, de saber que proveeré para las necesidades de todos cuando haga falta; deben cultivar esa actitud. Me alegra en gran manera proveer para las necesidades de Mis esposas. No soy un esposo mezquino que retenga para sus fines personales. Me alegra darles lo que tengo. Me alegra proveer. Tengo muchísimo que quiero darles. Pero si les falta fe para pedir lo que necesitan, si les falta fe para confiar en Mi provisión, ¿cómo podré darles lo que necesitan?
55. Me entristece que tantos hayan perdido esa fe para la provisión de sus necesidades personales. Si todos vivieran según la libertad de Mi Espíritu en ese sentido‚ tendrían lo que necesitan‚ todos tendrían sus necesidades satisfechas y estarían bien atendidos, y Yo haría más milagros de provisión para ustedes por su fe.
56. La fe mira al futuro con confianza, sabiendo que cuando surja la necesidad, proveeré para ustedes. La fe no acapara ni retiene nada de los demás por temor a que Yo no provea. Da sabiendo que los bendeciré y proveeré para ustedes cuando necesiten algo.
57. Esa es la actitud por la que deben luchar juntos. Pónganse la meta de tenerlo todo en común. Tengan un fondo común al cual se pueda aportar y del cual se pueda recibir cuando se tenga necesidad. Tengan una tienda gratuita a la que todos lleven lo que les sobre y no necesiten, e intercambien gratuitamente con otros. Para eso he dispuesto las bendiciones de la generosidad y de tenerlo todo en común, a fin de que todos tengan lo que necesiten y hasta lo que deseen, dentro del marco de Mi voluntad.
58. Me alegra proveer, y reboso de alegría cuando Mis esposas hacen partícipes de lo que les he dado a quienes tienen necesidad. Me entristezco cuando las veo retener y ser egoístas. No puedo bendecir a quienes persisten en esa actitud. Bendigo a los que dan de gracia, a los que dan aunque les duela.
59. Cuanto más den, más bendiciones y provisión podré derramar a cambio sobre ustedes. Pidan que infunda a su Hogar, y a cada uno en particular, la fe que necesitan para confiar en Mi provisión. Confíen en que proveeré cuando haya una necesidad. Compártanlo todo. Ténganlo todo en común. Notarán que a medida que se da y comparte más, cambia el espíritu del Hogar. Será mucho más cálido y agradable. Todos tendrán menos necesidades y Mi bendición de provisión sobre el Hogar será mucho mayor.
60. Confíen en Mí, y a medida que lo hagan y que manifiesten esa confianza mediante sus actos y su generosidad, fomentarán esa confianza en los demás. Cuanto más confíen en que proveeré lo que necesitan, mayor será Mi provisión para ustedes. Cuanto más hagan partícipes a los demás de Mis bendiciones, más bendiciones podré derramar sobre ustedes. Recuerden que el que retiene más de lo que es justo viene a pobreza (Pro.11:24). Si el Hogar no anda bien económicamente, miren a ver qué tan generosos son. Les garantizo que una vez que todos se abran y den más notarán la diferencia.
61. Yo siempre bendigo la generosidad. Aunque no les devuelva el mismo artículo, les enviaré múltiples bendiciones que jamás podrían comprar. También proveeré los artículos físicos y posesiones que necesiten. ¿Alguna vez he dejado de proveer para ustedes? Basta con que obedezcan, con que tengan la fe para tenerlo todo en común y confíen en que proveeré cuando tengan necesidad.
62. Esto cobrará cada vez más importancia a medida que se acerque el Fin, cuando no se podrá comprar ni vender si no se tiene la Marca de la Bestia. Tendrán que depender exclusivamente de Mi providencia y de que sus hermanos les pasen lo que no necesitan, y viceversa.
63. Me encargaré de que tengan lo que necesitan. Pero si no están dispuestos a repartirse con los demás lo que les doy‚ no podré proveer tanto, y con el paso del tiempo tendrán carencias significativas. La clave para satisfacer sus necesidades es dar. A medida que derramen, derramaré sobre ustedes, y nunca podrán dar más que Yo. ¿Amén?
En resumen:
64. (Mamá:) Tenemos la misión, por ser discípulos del Tiempo del Fin, de vivir en nuestros Hogares según el principio de Hechos 2:44-45: «Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas, y vendían sus propiedades y sus bienes y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno.» Debemos tener en común el dinero en el Hogar y decidir en conjunto cómo emplearlo, a fin de evitar que algunos tengan mucho y que otros no tengan lo suficiente. (V. la enmienda a los Estatutos sobre el Fondo Común en la BN 1107). Ese es el ejemplo que dan los verdaderos discípulos y una de las claves para recibir de lleno las bendiciones económicas del Señor en el Hogar.
65. También podrían estudiar la Palabra y los Estatutos, y escuchar al Señor, a fin de fijar pautas para el Hogar con relación a algunos de los asuntos prácticos u obstáculos con los que quizá se topen al poner todos sus ingresos en un fondo común. Por ejemplo:
*Qué hacer cuando una persona o una familia recauda fondos para trasladarse a otro campo de misión.
*Cómo administrar el dinero personal. Por lo general conviene que, de ser posible, todos en el Hogar reciban algún dinero para gastos personales. Tal vez tengan que decidir cómo recaudar ese dinero o incluirlo en el presupuesto a fin de garantizar que todos reciban la misma cantidad.
*Cómo administrar con amor y prudencia los donativos destinados a un fin específico, conforme al espíritu de Hechos 2:44-45.
*Cómo tratar pedidos especiales, por ejemplo cuando alguien quiera vender algo o recaudar fondos para una necesidad particular.
Promesa de las llaves:
66. Necesitas la fuerza de las llaves de la fe para ser capaz de entregarnos todo lo que posees, incluido tu dinero, a Mí y al conjunto de tu Familia. Pero conforme lo haces te bendigo a manos llenas y no te falta nada. Tu obediencia me permitirá cumplir Mis promesas de abundancia y provisión, que son más fuertes que el acero.
Pensamiento motivador:
67. (Papá:) Hace falta mucha fe para creer algo que ha dicho el Señor, sobre todo si va contra el razonamiento natural o la naturaleza humana. Sin embargo, la fe para obedecer fue lo que permitió que Dios salvara la vida de Noé y su familia‚ lo que demostró que Abraham era digno del linaje prometido y lo que hizo que descendiera sobre Moisés el ungimiento de Dios para guiar a su pueblo.
68. En la Biblia hay innumerables ejemplos de lo que se logró con la fe y la obediencia. La fe y la obediencia han generado provisión y milagros para el pueblo de Dios a lo largo de la historia, y esos principios siguen vigentes. Si obedecen a Dios, aunque solo sea por fe‚ tienen garantizados los milagros que necesiten‚ sean cuales sean. ¡Es un hecho! Si confían en Él y hacen su parte, Él nunca falla.
Ahonda más:
qHechos 1-10, CM 1383:44, 71-74, BN 036
qMetas para 1998, CM 3160:141-144,146–147, BN 765
qVivir la Ley del Amor del Señor‚ 2ª parte, CM 3202:9-15,18-21, BN 805
qExplicación de los pecados, CM 3453:39,40, BN 1038
qMuéstrame el dinero, CM 3462:120-123,125,377,384-399, BN 1047, 1049
qSin rodeos, 1ª parte, CM 3499:54-68, BN 1086
qOrientación y pastoreo: Criterios de evaluación‚ Enmienda a los Estatutos sobre el fondo común‚ BN 1107
La cuestión:
69. (Mamá:) Por ser discípulos plenamente consagrados, tenemos la obligación de dar ejemplo al mundo de vivir por fe y confiar en que el Señor proveerá para todas nuestras necesidades. Como discípulos tenemos que contar con Dios. Los criterios de la junta de orientación y pastoreo señalan claramente que los discípulos tenemos que manifestar fe en la capacidad del Señor de proveer abundantemente para nuestras necesidades. Pero en los últimos años ese ha sido un punto flaco de la Familia en general, porque desgraciadamente tendemos más a apoyarnos en el brazo de carne para satisfacer nuestras necesidades que a invocar en oración y con fervor lo que necesitamos y disponernos a obtenerlo a la manera de Dios.
Lo que piensa Dios:
70. (Jesús:) Muchos de ustedes, hijos Míos, piensan que el principio de contar con Dios solo entra en efecto una vez que han agotado todas las demás opciones. Así, andan de un lado a otro apoyados en el brazo de la carne procurando hacerlo todo; intentan recaudar fondos por sus propias fuerzas, corren frenéticamente tratando de abrir vías de provisión. Si bien deseo que hagan su parte y procedan por fe‚ la parte de ir y contar con que haga milagros para ustedes, no es lo mismo hacer eso que intentar hacerlo por sus propias fuerzas.
71. Cuando proceden apoyados en sus propias fuerzas sin haber recibido claramente Mi plan de acción, con mucha frecuencia acaban intentando por sus propios medios. No aplican Mi plan‚ que les daría la provisión que necesitan, y por lo general acaban exhaustos. Desgraciadamente, su espíritu también sufre, porque se desaniman y se exasperan.
72. El problema no es que el principio de contar con Dios haya fallado, sino que no han hecho su parte para que Yo pueda obrar por ustedes. Recuerden que contar con Dios significa depositar por entero la confianza en Mí, invocar Mis promesas y obedecer lo que les diga. Entonces proveo para todas sus necesidades conforme a Mis riquezas en gloria.
73. Les falta una fe infantil en que velaré por ustedes. Les falta esa fe porque están tan ocupados tratando de obtenerla a base de esfuerzos que no la fortalecen de la manera debida: zambulléndose de lleno en Mis Palabras para nutrir su fe, estudiando los principios y pautas generales, pidiéndome consejos personalizados en profecía y obedeciendo. Creen que me ayudan preparando el terreno, trazando un plan personal sin Mi asistencia y luego tratando frenéticamente de llevarlo a la práctica para que Yo pueda hacer los milagros. Pero si su plan no es el Mío, si no han escudriñado la Palabra para conocer el panorama general y no me han escuchado a fin de obtener Mi instrucción concreta para su situación, no puedo bendecirlo; no puedo actuar a favor ustedes y crear las condiciones para que puedan contar con que provea si no toman las medidas necesarias para hacer descender Mis bendiciones.
74. Trabajar con ahínco apoyados en el brazo de la carne con miras a crear oportunidades de que Yo provea para ustedes es una profesión que algunos han adoptado imprudentemente en la Familia. Les parece que tienen que esforzarse en la carne para crearme oportunidades de obrar el milagro. Dejemos algo claro: no soy Yo el que está recibiendo formación. No soy Yo el que tiene que aprender a contar con Dios eficazmente; son ustedes. Yo creé el principio de contar con Dios. Fui Yo quien pidió a Mis hijos que aprendieran a vivir por fe y a confiar en Mi provisión; ¿no creen, pues‚ que soy plenamente consciente de la parte que me corresponde? La pregunta que surge inevitablemente es, ¿qué anda mal?
75. Les paso a continuación algunas pautas para ayudarles a evaluar cómo les va y determinar con exactitud los aspectos en los que pueden estar impidiéndome que provea para sus necesidades:
76. 1) Obedecer la Palabra. ¿Obedecen plenamente? ¿Han estudiado fielmente las directrices que he fijado en la Palabra para la actualidad, las cuales les instruyen a hacer su parte y confiar en que Yo haré la Mía? Por ejemplo: ¿apacientan diligentemente a las ovejas y ponen esas prioridades por encima de lo que consideran necesidades importantes, confiando en que velaré por ustedes conforme obedecen? Este es solo un ejemplo, pero en la Palabra hay muchos más.
Texto en recuadro:
77. (Pregunta: ) Señor, queremos hacer lo mejor que podamos por Ti pero‚ ¿alguna vez podremos obedecer «plenamente»?
78. (Jesús:) Mis amores, empleo estos términos para animarlos e inspirarlos al máximo, no como varas con las que vaya a golpearlos cuando no cumplan. Sé que no son perfectos y que en este momento no pueden hacer nada de lleno aparte de ser Mis falibles creaciones humanas. Al mismo tiempo, los animo a amarme de todo corazón, con toda su alma y todas sus fuerzas. Les pido que sean perfectos y completos. Les instruyo que practiquen una religión pura y sin mancha. Las llamo Mis vírgenes, libres de las manchas del mundo. Mi intención al emplear términos tan amplios es convertirlos en más de lo que son, y al mismo tiempo elogiarlos por lo que son. No pretendo reprenderlos por lo que no son. Sencillamente animo a Mis amadas esposas a obedecerme lo mejor que puedan. (Fin del mensaje.)
Fin del recuadro.
79. 2) Edifiquen su fe. ¿Tienen una fe fuerte? ¿Hacen su parte para tener más fe en Mi capacidad de proveer? Desafortunadamente‚ muchos opinan que su fe solo crece cuando me ven hacer milagros, o cuando ocurre algo destacado que demuestra que Mi capacidad de obrar milagros sigue muy activa. Pero la fe se edifica mediante el estudio fiel de Mi Palabra. Y también aumenta obedeciendo Mi Palabra.
80. No deberían perder la fe tan fácilmente por las circunstancias. La fe cree que saldré al encuentro de ustedes. Se apoya por entero en Mí. Deben tener confianza en que soy capaz, porque tienen fe en Mí. Si la fe se les queda corta y no se apoyan por entero en Mí, esfuércense por fortalecerla, por crear un vacío para que Yo lo llene y confiar en que lo llenaré. Estudien lo que dice la Palabra sobre la fe; tomen nota de los aspectos en que andan flojos en la fe y aspiren a crecer en fe. Empleen las llaves de la fe con dinamismo y plena confianza en que funcionan.
81. 3) Consulten sus planes conmigo. Tal vez les parezca muy trillado, pero la verdad es que muchos de ustedes operan más que nada basándose en la costumbre. Como siempre han empleado ciertos métodos para recaudar fondos‚ no son tan fieles como deberían en averiguar si han cambiado Mis planes. Sus métodos de recaudación todavía no han llegado del todo a la etapa de consultármelo todo.
82. Mis métodos cambian, y ustedes tienen que cambiar con ellos. A veces es un cambio que solo hay que efectuar una vez; en otras ocasiones los guío a introducir un cambio temporal, y otras veces los guío a cambiar de métodos de un modo más definitivo. Pero si siguen ciñéndose a su vieja forma de obrar por pura costumbre, se perderán las bendiciones que podría darles al adoptar Mis nuevos métodos para la actualidad.
83. No se limiten a presentarme un nuevo plan esperando que lo apruebe, para luego salir a toda prisa a ponerlo en práctica. Reciban toda Mi instrucción; Mi plan completo. Quizá les diga que está bien que hagan tal cosa, pero si se detuvieran a escuchar un rato más‚ tal vez descubrirían que aunque su plan está bien, tengo un plan perfecto e impresionante. Si están demasiado apresurados, no recibirán la respuesta completa.
84. No les dé miedo cambiar de planes, aunque sean un poco descabellados, no se hayan probado antes o sean poco convencionales. Si el plan lo he dado Yo y tienen la seguridad de que así es, procedan por fe y crearán una oportunidad para que ocurran milagros.
85. 4) Alábenme en todo momento. El desaliento es una de las armas favoritas del Enemigo y actúa contra el principio de contar con Dios. Se vale del desaliento para debilitar su fe y confianza en Mí‚ y eso a su vez los motiva a esforzarse más todavía por sus propios medios. Refuten las mentiras desalentadoras del Enemigo con la alabanza. Empuñen esa arma invencible, y no solo se esfumarán los pensamientos desalentadores, sino que sentirán que desaparece su preocupación y aumenta su fe.
86. 5) Niéguense a preocuparse. Aunque piensen que del dicho al hecho hay mucho trecho, ¿no cuentan con armas espirituales que pueden hacer pedazos toda preocupación‚ temor e inquietud con que el Enemigo trate de oprimirlos? ¿No tienen las llaves para remontarse, el don de la fe, la alabanza que los ayudará a superar los obstáculos, la oración, que obra milagros y cambios, el don de profecía para escucharme, espíritus que los asisten y una relación íntima conmigo para disipar toda preocupación y temor? Entonces, ¿de qué se preocupan?
87. La preocupación impide que el principio de contar con Dios funcione de lleno, porque es algo que funciona a base de fe, y cuando están llenos de fe no se preocupan, no se inquietan ni desesperan. Combatan al Enemigo activamente en este aspecto no dando lugar a las preocupaciones, conservando una actitud positiva de alabanza aunque las circunstancias no sean las mejores.
88. 6) Hagan examen de conciencia. ¿Hay partes de su corazón que no están limpias o que no me hayan entregado por completo a pesar de que las haya estado alumbrando? ¿Se resisten a los cambios que quiere efectuar Mi Espíritu en su vida o su corazón? De ser así‚ quizá necesiten una limpieza espiritual en su corazón para beneficiarse plenamente de las bendiciones de la obediencia y la sumisión a Mí.
89. 7) Den aunque les duela. No esperen a estar en condiciones de dar; den cuando les duela y cuando Yo los impulse a hacerlo. Así crearán un espacio que podré llenar. Sean como la viuda de Sarepta, que dio lo poco que tenía, pero se la bendijo a manos llenas y logró sobrevivir a la hambruna (1Reyes 17:8-16).
90. 8) No se resistan a estirarse un poco. Parte de contar con Dios es estar dispuestos a dejar que los estire espiritualmente, que les exija un poco más de lo que están acostumbrados para ver si se apoyarán de lleno en Mí. Estén dispuestos a estirar su fe, aunque les duela un poco, y confíen en que ese estiramiento es parte del crecer. En estos Días Postreros, cuanto más se estiren, mejor, pues ello hará que su espíritu conserve la flexibilidad y la agilidad, cualidades que necesito en Mis discípulos.
91. Esas son apenas unas pocas medidas que les ayudarán a crecer y a aprender a confiar en que proveeré lo que necesiten. Para aprender a confiar en Mi provisión es preciso que abandonen sus actitudes y opiniones carnales, porque contar con Dios es espiritual. Es algo que se debe impulsar, aceitar y poner en práctica en el plano espiritual‚ al obedecer lo que he dicho. Debe estar respaldado por la Palabra, y se activa en conjunto con sus armas espirituales y con la confianza en que honro y bendigo la obediencia.
92. Que los aprietos no les infundan temor o inquietud. Confíen en que tengo un magnífico plan que se destacará a medida que ustedes cumplan su parte. Me encanta proveer para Mis hijos, y lo hago siempre que puedo. Por eso, si hacen su parte para cumplir los requisitos, los resultados los alegrarán a ustedes y me alegrarán a Mí. Aprender a confiar en Mi provisión y depender enteramente de Dios es parte de su formación y crecimiento espiritual.
93. En el Tiempo del Fin contarán con muy pocos medios prácticos para satisfacer sus necesidades económicas y tendrán que depender principalmente de que Yo provea por medios sobrenaturales. Hoy en día todavía tienen vías de escapatoria, pues pueden emplear muchos medios para llegar a fin de mes. No siempre puedo bendecir generosamente esos medios, pero a veces les ayudan a arreglárselas.
94. En el Tiempo del Fin esas escapatorias se desvanecerán casi por completo. Pero si han cultivado con constancia el arte de depender por entero de Mí y tener plena fe en Mí, no solo vivirán mejor ahora -ya que puedo proveer mucho más de lo que necesitan-, sino que estarán mejor preparados y tendrán fe en que los sacaré adelante en los tiempos tenebrosos que se avecinan. Su fe y confianza en Mí habrán aumentado tanto que contarán con milagros mayores y más portentosos que obraré inmediatamente por ustedes‚ Mis esposas del Tiempo del Fin.
95. No teman dar ahora los pasitos iniciales que les aumentarán la fe. Sigan avanzando, reforzando su dependencia de Mí y de Mi Palabra, y verán cuánto puedo hacer gracias a su fe.
En resumen:
96. (Mamá:) ¿Recuerdan lo que dijo el Señor en Un año de fortalecimiento (CM 3577)? Nos dijo que en 2006 nuestros Hogares tendrían que volverse más estables económicamente. Tenemos que cultivar mejores bases de sustento, vivir menos al día y aprender a tener más fe en la provisión del Señor. El mensaje anterior acompaña muy bien la instrucción que dio en dicha BN cuando dijo:
No basta con que fortalezcan su Hogar espiritualmente; también deben hacerlo en un sentido práctico. Un aspecto práctico en el que necesitan fortalecerse muchos Hogares es el económico. Deben esforzarse por dirigirse a los ricos y cultivar reyes, sustentadores, amigos y proveedores que puedan satisfacer sus necesidades, para que con el tiempo apenas si necesiten recaudar fondos y puedan concentrarse en ofensivas, en tomar la iniciativa y hacer campañas de testificación que quizá no reporten ingresos inmediatos pero den lugar a portentosas cosechas.
Tener estabilidad económica -al menos mucha más que la que tienen en la actualidad los Hogares- es clave para que la Familia se convierta en el ejército ofensivo del futuro que he prometido que será. Claro está que nunca gozarán de una estabilidad económica total, pues siempre vivirán por fe y deberán depender de Mí. Pero deberían tener ingresos mucho más estables, y los tendrían si obedecieran las instrucciones que di en la serie Muéstrame el dinero y otras Cartas. Es un aspecto en el que tienen que trabajar en 2006, ya que es parte del progreso y la continuación del fortalecimiento. (CM 3577:125–126, BN 1163.)
97. Si no han tenido oportunidad de estudiar la serie Muéstrame el dinero desde que leyeron Un año de fortalecimiento, les recomiendo encarecidamente que lo hagan. Así se reforzará la fe de su Hogar y les ayudará a ser capaces de alcanzar las metas económicas que ha fijado el Señor para 2006. En dicha serie (CM 3462, BN 1047-1050) encontrarán prácticamente todo lo que necesitan saber sobre la provisión del Señor y sobre cómo apropiarse de las promesas del Señor. Oro que volver a estudiar esas BN sea una bendición para ustedes y les ayude a retener y poner en práctica los principios explicados en esa serie tan importante, así como la instrucción que ha dado el Señor en el mensaje de este número de Sin rodeos, ya que van de la mano.
98. «Contar con Dios será lo que marque la diferencia entre el éxito y el fracaso, entre un final prematuro y vuestra esperanza de supervivencia. Es la diferencia entre la vida y la muerte para las almas que esperan conocer Mi mensaje. Significa la diferencia entre que obtengáis las bendiciones y promesas que os tengo reservadas, y pasar por la vida como mendigos, faltos de lo que necesitáis.» (CM 3363:164‚ BN 959.)
Promesa de las llaves:
99. Las llaves de la obediencia abonan el terreno para Mis bendiciones‚ las llaves de la fe abren las cámaras del tesoro del Cielo y las llaves de la apropiación te motivarán a extender las manos por fe para recibir lo que te corresponde por derecho.
Pensamiento motivador:
100. (Papá:) No hay muchos que tengan lo que hace falta para vivir por fe, porque se oponen totalmente al razonamiento carnal y los caminos terrenales. Pero a los que lo hacen Dios los bendice de formas que los planícolas nunca conocerán. Vivir por fe los separa del mundo. Los destaca entre las multitudes. Los hace diferentes, únicos; ¡un fenómeno!
Ahonda más:
qPuestos los ojos en Jesús, CM 126:25-27, Vol.1
qSiervos, superiores o todavía mejores, CM 1036:37-39,42,44-45,59-62, Vol.9
qLas bendiciones económicas de Dios, CM 2813:1,25–40, BN 527
qCon relación a George Mueller‚ CM 2814:1–3,7–11,18,23-29, BN 527
qSean misioneros‚ CM 3135:105-110, 744
qApartaos, CM 3363:55-69,146-147,151-165, BN 959
qOraciones contundentes, CM 3566:105-116, BN 1154
qDJCC 1:82, 415
qGuía práctica para el pilar de orientación y pastoreo, BN 1108
qProvisión, nº1-2,4-6, Manual de la Palabra
La cuestión:
101. (Mamá:) Hace poco recibí esta triste nota de un ASG al que le preocupaba el grado de murmuración que reina en la Familia.
102. Cada vez me estoy dando más cuenta de hasta qué punto abunda la murmuración en la Familia. Muchos cada vez se sienten más con mayor libertad para quejarse, y ni nos damos cuenta de la medida en que lo hacemos. Yo mismo lo hago, así que no estoy señalando a nadie. Lo que pasa es que me punza a la conciencia que la actitud de gratitud que caracterizaba a los primeros discípulos de la Familia ha disminuido tan drásticamente que se ha convertido en un fenómeno poco común.
103. Las comparaciones son odiosas, pero es admirable la gratitud que manifestaban todos en aquellos primeros tiempos. Todos rebosaban de tanto entusiasmo por tener la verdad, el espíritu, gozo, amor, paz y libertad y ser parte de la Revolución que les daba igual lo que les pasara‚ dónde dormían, qué comían, qué llevaran puesto o lo que tuvieran que hacer. Como decía esa cita de Papá, ¡se alegraban tanto de contar con el gozo de su salvación que estaban dispuestos a hacer lo que fuera motivados por el sencillo amor y la gratitud que sentían por Jesús!
104. Algunos jóvenes transmiten la fuerte impresión de que consideran que la Familia les debe algo solo por haber nacido en ella. Lamentablemente, no ven algo muy importante: que haber nacido en ella es uno de los mayores favores que la Familia jamás les ha hecho. Es un honor haberse criado en ella, y yo diría que el Señor nos exige más por esa misma razón. Deberíamos agradecer tanto no tener que haber dedicado años a buscar la verdad, olvidarnos de todo lo que nos habría enseñado el Sistema o tratar de superar el trauma de una vida sin amor, que estemos dispuestos a hacer lo que sea por el Señor, los demás y los perdidos.
105. Algunos adultos de la primera generación lo ven de otra manera. Piensan: «Di los mejores años de mi vida a la Familia durante tantas décadas que ahora espero tal o cual». En ambos casos, por lo visto pensamos que le hacemos un favor a la Familia, cuando lo cierto es que tenemos la bendición de formar parte de ella.
106. Lo que pasa con esta actitud es que genera un espíritu de murmuración, ni más ni menos. Si nos concentramos tanto en lo que nos debe la Familia, caemos en una onda de descontento y quejas, en vez de darnos cuenta de lo mucho que le debemos a la humanidad por lo que hemos recibido.
107. Muchas veces pienso en personas como Bill Gates que son más ricas que la mayoría y en que solo eso las coloca en una posición de responsabilidad. Prácticamente están obligadas a ayudar al prójimo, a los que no son tan afortunados. Pero lo cierto es que espiritualmente nosotros somos multimillonarios, y por tanto tenemos ese mismo deber para con los demás.
108. Esa actitud de ver cómo podemos beneficiarnos a nosotros mismos ha creado una epidemia de murmuración y de imponer ciertas exigencias para sentirnos felices. Estoy de acuerdo en que todos queremos cumplir lo que se exige al discípulo profesional, lo cual es bastante, pero entre esas exigencias también se cuenta estar contentos y agradecidos sea cual sea nuestra situación y estar dispuestos a hacer lo que sea de buen grado sencillamente por lo mucho que se nos ha bendecido.
109. El Señor ha hecho mucho hincapié en la alabanza, y por una buena razón. A lo mejor tendríamos más temor de Él y obedeceríamos toda la instrucción sobre la alabanza y sobre emplear esa arma con fervor si se pusiera al descubierto la murmuración como lo que es en realidad, o si se dejaran al descubierto esas maneras sutiles en que el Enemigo desvía nuestra atención de lo que deberíamos dar, de lo que debemos al Señor y a los demás‚ haciendo que nos concentremos más en lo que a nuestro juicio nos merecemos.
110. Me parece que se aplican las breves palabras de sabiduría de Papá: no podemos quejarnos y alabar al mismo tiempo. Si en todo momento damos gracias al Señor por lo buena que es nuestra situación, no tendremos tiempo para quejarnos de lo que creemos que no se nos da.
111. Si el Señor se está valiendo de la alabanza como un arma muy importante para esta era, cabe esperar que el Enemigo trate de convencernos de hacer lo contrario: murmurar. Creo que las quejas deberían volver a ser tabú en los Hogares. Claro está que todos deben sentirse con libertad para expresar sus sentimientos con oración a las personas indicadas, pero buena parte de la murmuración se lleva a cabo so pretexto de sincerarse. La Biblia es muy clara al respecto: «He aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación» (Fil.4:11), aun cuando estemos pasando por una batalla. Yo lo hago tanto como cualquier otro, así que sé que también necesito este cambio.
Lo que piensa Dios:
112. (Papá:) No sé cuántas veces habré hablado de la murmuración. Se han dedicado Cartas enteras al tema, y algunas de mis charlas más enérgicas han sido sobre eso. Lamentablemente, las quejas se han vuelto a infiltrar en las filas de la Familia de una forma alarmante, y muchos ni se dan cuenta de ello.
113. Me refiero a todas las manifestaciones de la murmuración; desde las quejas sencillas al estilo de: «¡¿Otra vez frijoles?!»‚ o: «¡Qué lata esto de lavar los platos!», hasta la murmuración más grave. Hubo una época en la que estaba muy mal visto, y la mayoría de los hermanos se abstenían de pronunciar esas quejas. Con pena tengo que decir que en la actualidad hay muchos Hogares en que la murmuración y las quejas descaradas no solo se toleran, sino que se aceptan como lo más natural.
114. No entraré en los detalles de cuánto aborrece Dios la murmuración ni los motivos. Tampoco les contaré la historia de los hijos de Israel en el desierto‚ porque pueden releerlo ustedes mismos, y seguramente deberían hacerlo. [V. El destino de los murmuradores‚ en las páginas 480-487 de Tesoros.] Sin embargo, quiero abrirles los ojos a que la actitud de murmuración se está extendiendo cada vez más y cada uno de ustedes tiene la obligación de ponerle coto.
115. La razón principal por la que hay muchas más quejas de las que ha habido en mucho tiempo es que ciertas actitudes se han infiltrado en la mente de muchos hermanos. Algunos se creen con derecho a murmurar por varias razones. Por ejemplo:
-Son jóvenes que han nacido en la Familia y por tanto han hecho muchos sacrificios, así que consideran que la Familia se lo debe todo.
-Son adultos de la primera generación que llevan años en la Familia y han pasado mucho en su vida de discípulos. Les parece que la Familia debería agradecerles los servicios prestados y que las penalidades que han soportado les dan derecho a quejarse un poco.
-Sea cual sea su edad, piensan que sus pastores no se esfuerzan por que la vida les resulte cómoda ni les brindan suficiente ayuda espiritual. Así que en vez de hacer algo ustedes mismos, se consideran con derecho a murmurar y quejarse.
-Están tan acostumbrados a la provisión y los cuidados que les brinda el Señor que no los aprecian. Dan por descontada buena parte de esa provisión y protección.
-Los mayores ven el botón que le falta al chaleco mientras que los jóvenes se han acostumbrado a vivir con cierto nivel y no se dan cuenta de lo mucho que se los ha bendecidos en realidad.
-Envidian y codician lo que ofrece el mundo y se quejan si su situación no es tan buena como la que parece tener el mundo. No ven que son el pueblo elegido de Dios y viven separados del mundo por una razón: para que no caigan bajo su yugo de esclavitud.
-Nunca han experimentado lo que es pasar necesidad ni han aprendido a respetar y cuidar lo que les da el Señor. Eso ha afectado su gratitud.
-Han hecho caso omiso de la Palabra, que los insta a hacerlo todo sin murmuraciones ni contiendas. Piensan que está bien quejarse «un poquito».
-Han prestado atención a la voz de los demonios de Selfegión y se han acostado en las sábanas de Letargo.
-Se han sometido a Baco, que los ha atrapado con sus tentáculos‚ infundiéndoles insatisfacción con lo que tienen y alimentando su adicción a tener más y más cada vez.
-Tienen una opinión elevada de sí mismos y de lo que hay o no hay que hacer. Están ensoberbecidos y no consideran superiores a los demás. Creen que se merecen lo mismo o incluso más que ellos. No ven los dones y las bendiciones del Señor como los ve Él‚ y piensan que los tratan injustamente.
-Los aqueja la actitud de pensar que hay ricos y pobres y de que no pueden ser menos que otros, y eso ha fomentado murmuraciones, quejas y falta de gratitud.
116. Sea cual sea la razón de su murmuración‚ está mal y punto. Nunca hay motivo o excusa para murmurar. ¡Jamás! ¿Entendido? Si alguna vez se sienten con derecho a murmurar y quejarse, pueden dar por sentado que se equivocan (Fil.2:14). Ni siquiera tienen que consultarlo con el Señor. Murmurar está mal, ¡y no hay más vueltas que darle!
117. Lo que sí tienen que preguntar al Señor es si no estarán quejándose de formas más sutiles. Tal vez no se quejen descaradamente de la comida pero, ¿suelen hacer comentarios negativos sobre cuestiones como la vida en la Familia‚ la vida en comunidad, los pastores y el pastoreo? A lo mejor hasta ablandan sus comentarios un poco para que no parezcan tan negativos. Pero si no hablan de forma constructiva y a la hora de la verdad no hacen nada por cambiar la situación, lo más probable será que estén murmurando.
118. Si no están seguros, evalúen sus motivos. Si se dan cuenta de que a cada rato dicen cosas como: «Aprecio la casa que nos ha dado el Señor, pero desde luego el jardín es un desastre», y nunca toman una pala o un azadón ni levantan un dedo para hacer nada, sus críticas no son constructivas y no son más que murmuraciones. Ahora bien, si lo dicen un par de veces y en efecto hacen algo por arreglar el jardín, eso es mucho más constructivo y sin duda tienen la actitud correcta; procuran resolver el problema en vez de limitarse a exponerlo.
119. Ampliemos un poco más el ejemplo del jardín. Digamos que salen a echar una mano para ocuparse del jardín, pero con cada mala hierba que sacan refunfuñan entre dientes quejándose de que nadie les ayuda. Pues eso es murmurar, y seguramente está más mal que lo que hacen los demás integrantes del Hogar, que quizá sean algo perezosos.
120. En todo momento deben cotejar sus comentarios negativos con su actitud. Si no están pensando hacer nada, o si no pueden hacer nada, o si el Hogar ha votado en cierto sentido que a ustedes no les agrada, seguramente no hay razón para insistir sobre el asunto; ya sea con el Hogar‚ con su cónyuge, con sus amigos o en su corazón.
121. En el caso de algunos que han adquirido el mal hábito de murmurar, casi no hay mejor forma de superarlo que pedir humildemente oración. Y no se olviden el arma ofensiva de la alabanza. Pónganse a la ofensiva y tomen todas las medidas que hagan falta para derrotar al Diablo. Fijen medidas de protección si es necesario. La unión hace la fuerza. Si el Hogar arremete junto contra esta maquinación del Diablo, ahuyentará al Enemigo.
122. A algunos les parece anticuado pedir oración contra la murmuración y ponerse a la ofensiva con el conocido método de la alabanza positiva. A lo mejor les parece que ya lo hicieron lo suficiente en los primeros días de la Familia o en tal o cual combo y que ahora que son discípulos mayores y más maduros están por encima de eso. Pues no es así ni mucho menos. La murmuración es una debilidad tonta, sin sentido y pueril, pero se puede remediar con bastante facilidad con el sencillo y antiguo método de orar y alabar al Señor.
123. Tengan presente que son discípulos profesionales. No son ex combatientes ni jóvenes consentidos; son discípulos profesionales. ¡Así que demuéstrenlo y desháganse de esa asquerosa murmuración! No hará más que apestar en su vida y su Hogar y corroer su discipulado.
124. Ahora tienen a su disposición armas espirituales bastante poderosas, así que no tienen excusa para quejarse y murmurar. ¡Al contrario, tienen todas las razones habidas y por haber para lanzarse a matar espiritualmente al Enemigo, haciéndolo papilla con el poder de la alabanza positiva! ¡Aleluya!
En resumen:
125. (Mamá:) ¡Dios sigue aborreciendo la murmuración, se manifieste como se manifieste! Nuestros Hogares deberían rebosar de alabanza, en vez de refunfuños y quejas. La alabanza y la murmuración no pueden ocupar el mismo sitio‚ así que emprendamos una campaña de alabanza‚ y pondremos en fuga todo pensamiento y palabra quejumbrosos.
126. Y si alguno tiene la debilidad de murmurar, ya sea algo ocasional o crónico, pida al Señor que lo ayude. Escuche al Señor para que le indique cómo superar sus malos hábitos y adquirir destreza con el arma de la alabanza. ¡Pida oración, estudie la Palabra y póngase a la ofensiva contra el Enemigo! ¡Que convierta su debilidad en un punto fuerte!
Promesa de las llaves:
127. Las murmuraciones, el descontento y la insatisfacción huyen en cuanto se enciende la antorcha de la alabanza. ¡Emplea las llaves y prende tu antorcha de alabanza!
Pensamiento motivador:
128. (Papá:) La murmuración te conduce a las profundas y asquerosas simas del Infierno. ¡La alabanza te eleve hasta el Cielo! ¿En qué dirección quieres ir? ¿Hacia donde deseas dirigirte, hacia arriba o hacia abajo? ¡Tus palabras te guiarán espiritualmente en esa dirección!
Ahonda más:
qLuchadores, CM 551:11-18,40-47,51-52,58-59, PCD13
q¿Medicación?… ¡O peregrinación! CM 599:78–79,83,87-88,110–112,114,116-120,124-128, Vol.4
qLa eficacia de la alabanza positiva, CM 1375:20-21,25–27,46,48–53,58-62, Librito 18 de BN
qEn guardia, CM 1377:1‚46-49,103,105-106, BN 37
qDios aborrece las murmuraciones, CM 1879:4,6‚17,19-21,24,30-32,34,36,40,44-45,47,54-55, BN 172
q¡El resentimiento! ¡Raíz amarga y mortífera que devora y destruye! CM 2672:54-64,75–81,100-108,174-197, BN 461
qMetas para 1998, CM 3160:54-60, BN 765
qMuéstrame el dinero, CM 3462:422-428‚ BN 1050
qEl arte de la guerra, 2ª parte‚ CM 3533:224-230‚ BN 1131
qSin rodeos, 13ª parte, CM 3536:56-83, BN 1127
qAlabanza = respuestas, soluciones, progresos, poder y victoria, CM 3539:6–9, Enlaces nº1
qDJCC 1: 333
qGratitud‚ nº1-6, Manual de la Palabra
La cuestión:
129. (Mamá:) Ya hemos hablado de las que desean estar excesivamente delgadas. Sin embargo, he recibido informes de que se trata de algo que, desafortunadamente‚ lo fomentan algunos hermanos varones. Les paso parte de una de esas cartas:
130. Desde hace un tiempo queremos escribirte sobre cierto aspecto relacionado con la anorexia y la bulimia: el efecto que tienen en las chicas los comentarios de los chicos a los que aman cuando expresan que les gustan las chicas delgadas. En este momento dos hijas nuestras están muy obsesionadas con hacer gimnasia en exceso o comer muy poco o solo verduras y cosas que no engorden. Las dos son muy flacas y nos han dicho que sus maridos les han dicho que les gustan las delgadas. Una de ellas ha sufrido varios abortos espontáneos en los últimos años, y nos preguntamos si no tendrá que ver con su estado de salud y con que lleva mucho tiempo comiendo muy poco.
131. Nos parece que la influencia del marido en la mujer tiene bastante peso y que nuestras chicas están obsesionadas con mantenerse excesivamente delgadas para no perder el cariño de sus esposos. Ahora bien, comprendemos que somos los padres y ello puede influir en nuestra opinión, pero creemos que la Familia no solo anda mal en cuanto a lo que las chicas entienden por belleza, sino que la actitud de muchas refleja lo que algunos les dicen.
132. También nos hemos enterado de otras chicas que dicen que a algunos chicos les gustan las delgadas, por lo que nos parece que también podría ser una debilidad de otros hermanos varones. En otras palabras, no es solo que las chicas deseen ser delgadas por fijarse en las modelos, sino que algo igual de malo, o quizá peor, es que algunos varones tienen un gusto erróneo por las flacas. Nos parece que eso tiene un efecto todavía mayor en ellas y las conduce a la anorexia y la bulimia para agradar a su novio o su pareja.
133. Por lo visto, la filosofía de la mujer flaca tiene un origen maligno. Está causando grandes padecimientos a algunas hermanas y no está desapareciendo.
Lo que piensa Dios:
134. (Jesús:) Las mujeres son las criaturas más hermosas y magníficas de la Tierra. Siento gran placer al contemplar su belleza y variedad. Las amo a cada una, sea cual sea su figura o el tamaño de su busto o cintura. Cada una es una obra de arte y motivo de orgullo.
135. Lo ideal sería que los varones vieran a las mujeres de la misma forma; como hermosas creaciones cuya variedad es de apreciar. Sencillamente, cuanto más aprecien las distintas figuras y tamaños de ellas, mejor lo pasarán en sus relaciones sexuales y en su compañía.
136. Claro que también comprendo que cada hombre es distinto y tiene sus gustos y preferencias particulares en lo que se refiere a las mujeres. No es que todos estén dotados de Mi actitud sobrenatural que aprecia al 100% a todas sin preferencias concretas. Algunos sí tienen ese don, pero son pocos, porque son humanos y tienen sus preferencias. Unos las prefieren con más curvas. A otros los atraen más las morenas. Y a otros las asiáticas. Hay una variedad impresionante dentro del bello sexo.
137. Claro que cuanto más las aprecien a todas, más disfrutarán de la vida, pero no sientan condenación si tienen alguna preferencia. Así se los creó. Algunos disfrutan más de los dulces que otros; algunos son más aficionados que otros a los deportes de acción. A algunos les gusta el vino, mientras otros prefieren otras bebidas alcohólicas.
138. Sin embargo, un aspecto importante que quiero tratar es la preferencia de algunos por las flacas. Si las prefieren delgadas, puede ser porque los creé así. A lo mejor les gustan las chicas pequeñas y menudas más que las que tienen un cuerpo curvilíneo y más grueso, y eso puede ser perfectamente normal. Pero notarán que digo «puede ser» y «a lo mejor»; es que es muy posible que su preferencia por las delgadas no provenga de la forma en que los cree, sino de las actitudes fomentadas por los medios de comunicación.
139. En la farándula mundana, la mujer ideal casi siempre será más delgada de lo que es realista para la mayoría de ellas. En el caso de las modelos mundanas, delgadas ni siquiera es la palabra apropiada; son más bien esqueléticas. La mayoría hacen lo indecible por ser delgadas y convierten a propósito la anorexia o la bulimia en una forma de vida. La imagen ideal de una mujer para el mundo es cada vez más flaca‚ y muchos hombres del mundo –y hasta de la Familia, sobre todo jóvenes-, siguen la corriente como zombis.
140. Muchachos, si están tan obsesionados con las flacas que automáticamente consideran poco atractivas a las que son un poco más llenitas, algo anda mal. Una cosa es tener cierta preferencia por las pequeñas, y otra muy distinta es estar tan influidos por la mentalidad del mundo que solo les atraigan las flacas.
141. Lo peor es expresar esa opinión mundana verbalmente o con insinuaciones. Puede tener un efecto muy negativo en su esposa, novia u otras conocidas del sexo femenino. Algunos son responsables directos de la angustia mental y desaliento que sufren algunas, o de las torturas de la anorexia y la bulimia. Es muy grave. Por eso, si son de los que sienten una atracción exclusiva y malsana hacia las delgadas -en algunos casos mujeres tan flacas que parecen enfermas–‚ consúltenme y pidan oración contra esa influencia mundana.
142. Permítanme recalcar que no deberían sentir automáticamente condenación si tienen una preferencia personal por las chicas más delgadas, en tanto que su actitud sea equilibrada. Pero aun si esa es su preferencia‚ si tienen una actitud sana, también se sentirán atraídos hacia otro tipo de mujeres y apreciarán a cada una por los atributos que le he dado que son hermosos y a veces singulares. Si no es así‚ tienen que pedirme que les transmita Mis actitudes. También podría ser beneficioso que hablen del tema con su esposa o su novia‚ o con sus pastores, y que les pregunten cuál es la impresión que dan, pues algunos de ustedes casi ni se dan cuenta de la actitud mundana que tienen sobre las mujeres.
143. Con sus comentarios de que no les gustan las que tienen unos kilos de más, o los comentarios faltos de oración al decir que fulana es tan linda por lo flaca que está, pueden estar haciendo daño a la mujer a la que quieren y desanimándola hasta tal punto que pueda irse al extremo para mantener la figura que prefieren ustedes. Esto puede ser aún más así en el caso de las de treinta y tantos años o más, edad a la que se vuelve más difícil conservar la supuesta figura ideal, y hay tantas otras más jóvenes y flacas con las que competir.
144. No cabe duda de que conviene que la mujer procure estar saludable y mantener su peso a un nivel sano. Pero hay demasiadas cuyo peso ya es perfectamente sano, o que incluso están demasiado flacas, pero se la pasan a régimen o hacen gimnasia en exceso para tener una figura más estilizada. Eso me entristece mucho.
145. Por eso, si sospechas que podrías tener una mala actitud en este sentido, te ruego que lo hables con tu esposa o tu novia o quizá hasta con tus pastores y que también me pidas consejos. Puedo ayudarte a dar con el equilibrio debido y distinguir entre tus preferencias y las actitudes destructivas y poco realistas del mundo. Al final estarás mucho más contento y también lo estarán las chicas que te rodean. Confía en Mí.
En resumen:
146. (Mamá:) En lo que se refiere a la belleza, algunos pueden preferir las rubias a las morenas, o las mujeres de tez oscura a las blancas. Quizá les gusten más las mujeres altas que las bajas, o las más entradas en carnes que las pequeñas. A lo mejor prefieren los pechos pequeños a los grandes. Las opciones en cuanto a preferencias personales son interminables, y no tiene nada de malo que tengan un gusto personal. No obstante, si las únicas mujeres que les parecen hermosas son las que se ajustan a su concepto de perfección, y si expresan esa actitud, seguramente han permitido que sus preferencias personales se contaminen con el mundo.
147. Independientemente de sus gustos en materia de belleza femenina, deberían ser capaces de admirar la belleza que Dios ha dado a cada una. Cada una tiene algo que pueden apreciar y los puede atraer si la miran con los ojos espirituales. Y tienen que darse cuenta de que su actitud hacia las chicas y los comentarios que hacen sobre ellas -aunque sea a sus espaldas-, pueden alentarlas, animarlas y hacerlas más hermosas‚ o desanimarlas y sumirlas en la más honda depresión y negatividad.
148. ¡No empujen a ninguna de nuestras bellas hermanas al abismo del desaliento, la anorexia o la bulimia por culpa de conceptos mundanos de la belleza! Las mujeres de por sí ya tienen que lidiar con bastante desaliento con relación a sí mismas, como para que encima ustedes aticen el fuego con sus actitudes y comentarios. Anímenlas. Busquen y reconozcan la belleza en cada creación de Dios. Véanlas como las ve Dios, no a través de los ojos del mundo.
P.D. de dos hermanas, una de la segunda generación y otra de la primera
149. Enviamos a Kristen una copia adelantada de este mensaje y estas fueron sus impresiones‚ que pensé que podrían encontrar interesantes.
150. ¡Muchas gracias por enviarme esa porción de ese número de Sin rodeos! ¡Es estupenda y me parece que contiene un mensaje muy nutritivo y necesario!
151. Me compadezco de las chicas que están en esa situación. Pero creo que si alguna mujer oye comentarios así o cree que su marido o su novio piensa eso, debería preguntárselo directamente en vez de limitarse a creer que él piensa así o basar su vida y su salud en un comentario que él hizo en una o dos ocasiones. La verdad es que el cuerpo es de ellas, el bebé que pierden es de ellas, el cabello que se cae es de ellas‚ la piel que se llena de acné y se pone amarillenta es de ellas y es su vida la que se echa a perder, y puede que lo basen todo en un malentendido o que se hayan tomado demasiado a pecho un comentario que se hizo sin querer. Los hombres no siempre tienen mucho tacto en cuestiones delicadas, y aunque la mayoría seguramente apreciaría un cuerpo esbelto y en forma, seguramente querría igual a la chica aunque no fuera perfecta, es cuestión de que nosotras tengamos la humildad de reconocerlo y aceptar ese amor.
152. Por lo que se refiere a la anorexia, creo que yo me fui al extremo, pero sinceramente no puedo decir que fuera por culpa de ningún chico. De hecho, fueron los varones los que más se plantaron firmes conmigo, incluso algunos de los que me había dado la impresión de que les gustaban las flacas. Yo diría que los varones son muchísimo más tolerantes con unos kilitos de más por aquí o por allá de lo que lo somos las mujeres con nosotras mismas y las unas con las otras.
153. Yo diría que soy afortunada porque tengo un marido que me quiere aunque tenga nueve meses de embarazo y esté como una casa, je, je, y me hace sentir que soy la chica más linda del planeta a pesar de ello. He tenido que aprender a aceptar ese amor y no decir: «Cómo vas a pensar eso», cuando me dice que estoy bonita.
154. A mí me parece que las chicas que se dejan afectar por comentarios, miradas o impresiones tienen que evaluar su vida y su corazón. Según lo entiendo‚ muchos de los conceptos que creemos que tienen nuestros novios y esposos los proyectamos nosotras mismas. Pensamos que tienen tal o cual opinión, y por eso les decimos a todos: «Estoy flaca y cuido la línea porque mi esposo no quiere que esté gorda». Puede que sea verdad, pero también me parece que esas chicas tienen que examinar su corazón y ver a quién tratan de engañar.
155. Creo que las chicas tenemos que madurar y no dejar que todo nos afecte. Yo también me dejaba afectar, pero tuve que superarlo, aceptar el amor y la aprobación aunque no me sintiera digna, y seguir adelante.
156. (Mamá:) Una hermana de la primera generación que leyó una copia adelantada de este mensaje también nos pasó sus impresiones sobre la angustia mental que pueden provocar los comentarios sobre engordar en quienes se están haciendo mayores.
157. (Hermana de la primera generación:) Otro aspecto de esta cuestión de la delgadez son las que hacen comentarios sobre la apariencia de otras. Para las que nos estamos haciendo mayores o estamos pasando por la menopausia supone un gran cambio mirarnos al espejo y ver que el vientre y la cadera se nos expanden y ya no son tan firmes como antes. Aunque a otros no les parezca igual, cuando una conoce la figura que tuvo durante décadas y sabe que ya no es así y no volverá a serlo, porque así es la vida, pasa por un período de adaptación. He oído comentarios de parte de otras que pasan batallas por lo mismo.
158. He oído comentarios tanto de hermanos como de hermanas que no me han ayudado en ese sentido, y puede haber que luchar mucho mentalmente para no dejarse afectar. He engordado cinco kilos, casi todos en el vientre y el trasero, por donde suelen engordar las de mi edad. Me desanimo cuando me veo desnuda en el espejo. Ya no tengo el vientre plano, sino que ahora me cuelga sobre los pantalones. Evito mirarme al espejo, ¡y no tengo kilos de más! Cuando alguien dice: «Veo que has subido de peso», o: «Ya no te queda esa talla, ¿eh?»‚ me siento terrible.
159. Me encantaría estar como antes‚ pero esa época pasó. ¡Gracias a Dios que me veo tan bien como estoy! Pero debo confesar que a veces paso batallas cuando otras se fijan en las de la primera generación y dicen que no quieren estar así o cuánto lamentan que engordemos. Es una pena. Y luego, cuando se añaden comentarios de los varones, la cosa empeora. (Fin de las impresiones.)
Promesa de las llaves:
160. Invoca las llaves de la depuración para que se lleven las actitudes del mundo, y verás todos los aspectos de la vida con mucha más claridad. Será como recobrar la vista para un ciego.
Pensamiento motivador:
161. (Papá:) Por el amor de Dios, si tienen el honor de contar con una flor (una mujer) o más en su jardín (su Hogar), no dejen que se seque por falta de atención y cariño. O peor aún, que se marchite y pierda belleza por palabras y actitudes que no se ajustan a los principios de Dios.
162. Al contrario, sean como artistas espirituales que realmente aprecian la belleza en todas sus formas. Vean a cada una como lo que es, como un reflejo del amor de Dios en la vida de ustedes. Y si tienen que expresar una opinión sobre la belleza, expresen la de Dios, no algo que hayan oído o visto en el mundo.
163. En el mundo ya hay bastantes mujeres que tratan de ajustarse a los parámetros mundanos de belleza. Las hermanas de la Familia deberían ser libres de eso; deberían tener la libertad de resplandecer con la belleza particular que les ha dado Dios. Aprecien que somos distintos, que nuestras hermanas son variadas. No sean necios; ¡no apaguen la llama de su individualidad y su belleza singular obligándolas a conformarse a un molde mundano e impío! No los hará felices ni a ustedes ni a ellas.
Ahonda más:
qEl hombre mira lo que está delante de sus ojos, 2ª parte, CM 3125:44-80‚ BN 736
qCircular de Mamá, nº11, CM 3253:1-72,78-79, BN 858
qLucha por la vida, 1ª parte, CM 3390:205-207, BN en línea nº6
qLucha por la vida, 4ª parte, CM 3393:1-2,11-25,145–237, BN en línea nº9
qBaco desenmascarado, CM 3402:153-174, BN en línea nº4
qSin rodeos, 7ª parte, CM 3506:57-75, BN 1095
© La Familia Internacional, 2006